Volumen 2 Cap 6
Lo primero que vino en dirección a ellos fue una fuerte lluvia de ataques a larga distancia.
Aunque se tratase de la «Legión Amarilla», no tendrían por qué todos los miembros ser de color amarillo— así que no todos sus Burst Linkers se especializaba en ataques indirectos. De los treinta y algo enemigos que rodeaban el cráter, al menos diez eran de color rojo, los cuales lanzaban rayos y municiones explosivas, que más bien podría llamarse un bombardeo concentrado.
La mayoría de los ataques estaban dirigidos a Niko, pero el Rey Rojo era capaz de esquivarlos ágilmente sin su fortaleza encima. Pero uno de esos rayos, probablemente mal apuntado, fue en dirección a Haruyuki, quien estaba inmóvil sosteniendo a Kuroyukihime en sus brazos.
“Ugh…“
Fue capaz de moverse y esquivar el rayo, pero el ataque fue capaz de rozar su hombro izquierdo.
‘Esto ni siquiera alcanza a dañarme.’ Mientras pensaba en eso.
“¡¡…!!”
Haruyuki arqueó la espalda debido al intenso y agudo dolor que sentía en su hombro.
En los Duelos de Brain Burst, cada vez que se infringe daño, se siente un estímulo de dolor a diferencia de otras aplicaciones del Neuro Linker. Sin embargo, el dolor que Haruyuki estaban sintiendo ahora era el doble de intenso que en Duelos normales.
Eso quería decir que esto sólo se aplicaba en el Campo Neutral Ilimitado. Para balancear en contra al beneficio de obtener puntos sin arriesgarse en Duelos, existían las reglas especiales de «Tiempo ilimitado» y «No salir de inmediato», en conjunto a sentir el doble de dolor al recibir un ataque.
Haruyuki se detuvo un segundo, pero sólo eso bastó para que gran cantidad de misiles se dirigieran a su ubicación.
“¡Ooooh!”
Fue Takumu quien gritaba. Se puso frente a Haruyuki y Kuroyukihime, y Cyan Pile apuntó su armamento hacia el grupo de misiles.
‘¡Clic!’ Con ese sonido metálico fue que la afilada estaca de acero fue disparada, y debido a la onda expansiva, la mayoría de los misiles explotaron. No obstante, no todos fueron destruidos y golpearon de lleno en la azul armadura de Cyan Pile. Sólo se veían destellos y se oían las explosiones.
“¡Guaaa…!”
Aun gimiendo del dolor y tambaleándose, Takumu no cayó. Luego giró su enorme cuerpo cubierto por el humo de las explosiones hacia Haruyuki y le dijo.
“¡Haru, corre!”
“¡En-entendido!”
‘Lo siento’, mientras se disculpaba con Taku en su mente, Haruyuki comenzó a correr llevando consigo al avatar de Kuroyukihime. Comenzó a correr en dirección al lado Este del cráter, donde Niko estaba disparando con su revolver.
Si no podían salir de este encierro, no podrían retirarse ni contratacar. Afortunadamente, el enemigo rodeaba por completo los cerca de cien metros de diámetro del cráter, por lo que su defensa en sí es débil. Si lograban atravesar su barrera cargando en esa dirección, llegarían a la Autopista Verde, y de ahí a Sunshine City, con el Punto de Salida en ese lugar.
Sosteniendo a Kuroyukihime en su brazo derecho, Haruyuki desplegó las alas en su espalda. Fue capaz de llenar algo de su barra de ataques especiales con el golpe de hace poco, por lo que era posible atravesar rápidamente el borde del cráter.
Gracias al fuego continuo de Niko, había una abertura en el lado Este. Mirando hacia su salida, Haruyuki usó toda su fuerza para impulsarse desde el piso.
Pero en ese momento, pudieron oír la fuerte voz del Rey Amarillo haciendo eco en el lugar.
“¡¡…«Silly Go Round»!!”
¡Un ataque especial!
‘¡Pero ya es tarde! El borde del cráter esta junto frente a—’
“¡¿…Uaaaa?!”
El extraño fenómeno que ocurrió repentinamente dejó congelado a Haruyuki.
El mundo comenzó a girar. No, para ser precisos, teniendo el borde del cráter como línea divisoria, el interior y el exterior giraban en direcciones contrarias. Los edificios en el fondo y los Avatares de Duelo enemigos de pie, todo se movía a alta velocidad de izquierda a derecha.
Además, sin saber cuando comenzó, unos extraños caballos de juguete amarillos empezaron a moverse de arriba abajo mientras giraban en el lugar tranquilamente. Por otra parte, ahora podía oírse una alegre pero algo desentonada música de circo.
Perdiendo cada vez más y más el equilibrio, Haruyuki tuvo que apoyarse en una rodilla para no caer por completo. Viendo a su alrededor, pudo ver que Niko estaba frente a él y Takumu a su lado, ambos tratando de no caer, pero con sus cuerpos tambaleando.
“¿El cam…po está… girando?”
La aguda respuesta del Rey Rojo no se hizo esperar.
“¡Sólo parece que está girando! ¡Nada se mueve en realidad! ¡Cierra tus ojos y corre!”
“Pero… ¡¿a dónde?!”
Ya no podía discernir donde estaba el Este del Oeste. Si seguía hacia adelante y terminaba más lejos del Punto de Salida, ya no habría vuelta atrás.
“¡Por allá!”
“¡Por acá!”
Niko y Takumu apuntaron en direcciones opuestas al mismo tiempo.
En ese instante, como esperando que el grupo se dejara de mover—
Desde los bordes del cráter, una gran cantidad de líneas de fuego iba en dirección hacia ellos.
‘No podremos esquivarlo’, era lo que Haruyuki pensaba al ver los incontables ataques que venían sobre ellos desde todas partes. Algunas líneas de fuego se veían algo curvadas, pero sólo era una ilusión causada por el ataque de Yellow Radio.
Pensando en al menos proteger a Kuroyukihime, Haruyuki estaba a punto de cubrir a su pequeño avatar con sus alas extendidas.
Pero antes de que pudiese reaccionar, Takumu gritó.
“¡¡Al suelo!!”
Y cubrió a todos con sus fuertes brazos mientras caían al piso.
“Ta…”
Sorprendido por lo que ocurría, las palabras que salían de los labios de Haruyuki fueron silenciadas por los ensordecedores sonidos de las explosiones. Su vista estaba nublada por el humo, y sus mejillas estaban algo cálidas por el calor— y cerca de sus oídos, era posible escuchar como su mejor amigo trataba de suprimir los gritos de dolor.
“¡Gggggggh!”
Justo ahora, una interminable lluvia de ataques a larga distancia caía sobre la gran espalda de Takumu. Haruyuki recordó como el rasguño de hace poco le hizo sentir tal dolor… ¿Cuál sería entonces la sensación de dolor que estaba siendo forzada en los nervios de Takumu? ¿Acaso no estaría esto muchas veces por sobre el nivel de dolor que Haruyuki sentía en su sala de entrenamiento—?
“Detente… ¡Taku, detente de una vez!”
Haruyuki gritaba mientras trataba de salir debajo de Takumu.
Pero sus fuertes brazos impidieron que Haruyuki saliera, a la vez que su resquebrajada voz le dijo.
“No te… preocupes, Haru. Esto no es nada… comparado… a lo que… te debo…”
“¡No me debes nada… no me debes nada! ¡Cuántas veces debo decirlo para que entiendas, Taku!”
Su grito era desesperado, pero la respuesta le trajo más angustia. Mientras era sacudido por los interminables impactos, quejidos de dolor salían bajo las grietas de la máscara de Cyan Pile.
Mezclado con el sonido de las numerosas explosiones, la detestable voz del Rey Amarillo llegó a los oídos de Haruyuki.
“Qué desagradable… Quemen a ese muñeco de madera.”
Más ataques salieron disparados en respuesta a esas palabras, pero Takumu no cayó.
Probablemente los Burst Linkers rojos en el grupo enemigo no tenían un alto nivel. Contra ello, Cyan Pile no era sólo de Nivel 4, sino que además era de color azul con una alta resistencia. Eso significa que es capaz de recibir todo ese fuego concentrado sin caer y seguir resistiendo. Pero además significaba que el doloroso tormento que Takumu experimentaba sería más largo.
Haruyuki ya no sabía que decir. Takumu estaba determinado a proteger a los tres hasta que los efectos del ataque especial «Silly Go Round» del Rey Amarillo acabaran.
Niko también entendió esto y dijo.
“…Retiro lo que dije acerca de que no eras más que cerebro, Cyan Pile. Sólo treinta segundos más.”
“En… tendido… Yo…”
‘Gash.’
Haruyuki pudo distinguir un desagradable sonido cerca de él, a la vez que la voz de Takumu se esfumaba.
Lo próximo que pudo ver fueron tres brillantes y filosas puntas de metal saliendo desde el grueso pecho que lo protegía. Haruyuki estaba atónito.
No sabían cuando, pero los ataques de larga distancia se habían detenido hace un tiempo. Y mientras la alegre y extraña música de Go Round continuaba, el gran cuerpo de Cyan Pile se levantó del piso, aunque no por su propia fuerza.
De pie justo detrás de él, había un avatar de tamaño y color similar al de Cyan Pile. Su apariencia te hacía recordar un pesado equipamiento de ingeniería, con un enorme brazo derecho en lo alto. La punta de ese brazo terminaba en tres atroces garras, las cuales estaba profundamente enterradas en Cyan Pile desde atrás.
Era uno de los sujetos esperando para entrar en combate a corta distancia, que debió saltar al cráter debido a la frustración. De la cabeza con forma de televisor CRT pudo oírse lo siguiente.
“Había escuchado que eras un buen cadete de los «Azules». Parece ser que en lo único que eres bueno es en ser una dura pared, Cyan Pile.”
Levantando a Takumu ensartado en su brazo derecho, el gran avatar se comenzó a burlar de él.
“Jajaja, recuerda esto antes de que mueras. Quien te derrotó fue Sax…”
“¡No me interesa tu estúpido nombre!”
De pronto Takumu levantó su brazo derecho, y apuntó la estaca a su propio pecho.
“¡¡«Lightning Cyan Spike»!!”
Con un débil pero firme grito, un destello celeste salió desde el cañón de disparo.
En ese mismo instante, el rayo emitido atravesó el pecho de Cyan Pile, siguió por el brazo derecho del avatar enemigo, y avanzó hasta llegar a su cabeza. Esto causó que el brazo derecho y parte de la cabeza de ‘Sax algo’ salieran disparados, flotaran en el aire por un momento, y luego cayeran al piso con una explosión.
Debido a la ilusión de Go Round, incluso si el enemigo estaba frente a ti, no era posible apuntar adecuadamente. Pero era otra historia si ya conocías la ubicación de la cual el enemigo te sostenía, por lo que si seguías esa dirección, su cuerpo debía estar en ese lugar.
“¡¡Ta… Taku!!”
Haruyuki gritó.
‘Taku, eres increíble. Eres mucho más fuerte y listo que yo— me enorgullezco de ser tu amigo.’
Pero Haruyuki no tuvo la oportunidad de poner en palabras lo que sentía en su pecho.
“¡¡Aa… giaaaaaaaaaaa!!”
Mientras el avatar enemigo gritaba de dolor y caía al piso sosteniendo lo que le quedaba de rostro con su mano izquierda, Takumu se arrojó encima de él y usó sus últimas fuerzas para mantenerlo ahí.
Bajo la destrozada máscara que miraba a Haruyuki, la voz de Takumu comenzó a desvanecerse lentamente.
“Te dejo el resto a ti, Haru.”
Y con ambos brazos sostuvo con fuerza al enemigo en el piso—
“¡¡«Splash Stinger»!!”
Entre los dos avatares sólo se podían distinguir numerosos destellos y el sonido como el de una ametralladora.
El enemigo pronto dejó de moverse, y muchas luces comenzaron a aparecer de las grietas en los cuerpos de ambos avatares.
Un segundo después, dos pilares de luz azul se elevaron al cielo desde el fondo del cráter. Luego de que los restos de la explosiones desapareciera, los cuerpos de Takumu y su enemigo ya no estaban.
Casi al mismo tiempo, la ilusión de Go Round terminaba y con ello todo volvió a su estado original.
Nada más que silencio llenaba el cráter que en realidad era el parque al sur de Ikebukuro.
Los ataques a larga distancia ya se habían detenido, y sólo se oían el silbido del viento y los truenos en el cielo.
Los Avatares de Duelo especializados en ataques a larga distancia no podían disparar por siempre, ya sea que los cañones de aquellos que lanzaban rayos se sobrecalentaban, o aquellos que disparaban se quedaban sin municiones. Pero aun tomando en cuenta esos factores, el silencio era extraño. Tal vez ellos también quedaron inmersos ante la lucha de los dos avatares azules.
‘Esta es nuestra oportunidad para huir’, pensó Haruyuki. Por esta ocasión Takumu dio su vida. Pero por alguna razón no podía mover sus pies. Aun de rodillas, el delgado avatar de Haruyuki no dejaba de temblar.
Un sentimiento que no podía explicar se juntaba en su pecho.
El sentimiento de impotencia al no ser capaz de proteger a su mejor amigo. Rabia contra el Rey Amarillo por preparar esta despreciable trampa y jugar con los sentimientos de los demás. Y por sobre todo— lo que sentía hacia la persona que sostenía en su brazo derecho, el avatar negro oscuro que cayó sin ninguna fuerza como si le hubiesen cortado la energía—
“…Senpai… Senpai…”
Desde el fondo de su garganta, su apretada voz trató de hacerla reaccionar.
“Kuroyukihime-senpai… por qué… por qué no despiertas…”
“No tiene caso, Silver Crow.”
Niko fue quien murmuró aquello.
Con un decidido paso, el Rey Rojo levantó su cuerpo.
“«Zero Fill»… En estos momentos, la señal generada por su alma que debiese ser transmitida para controlar su avatar es cero. Un Burst Linker sin la voluntad de luchar no puede controlar su Avatar de Duelo. Esto se debe a que la fuente de energía de un Avatar de Duelo es la calidez del corazón de su dueño. Si no tienes la fuerza suficiente para enfrentar tus heridas, ni siquiera podrás ponerte de pie. Ese tipo de juego es «Brain Burst». Ella lo tenía bastante claro, aunque no quisiera enfrentarlo. Pero es un problema del cual no puedes hacer mucho, incluso si ya lo conoces.”
Luego de dar esa explicación en voz baja, Niko dio una mirada rápida a Haruyuki.
“…Lo siento, sé que Cyan Pile se sacrificó para darnos algo de tiempo… pero no voy a huir. No está en mí el escapar en este tipo de situaciones. Así que toma a esa chica y lárgate de aquí.”
Haruyuki pensaba que el pequeño avatar escarlata estallaría en llamas.
No, no era una ilusión. En realidad pudo ver las llamas cerca del área donde estaban sus pies.
‘Es demasiado osado. Los enemigos están prácticamente sin daño. No hay forma en la que podamos ganar.’
Haruyuki pensaba que escapar era la opción más sensata, pero aun así no se movía de ese lugar. Si abandonaba a Niko a su suerte y huía, se dio cuenta que perdería algo, no sólo él, sino que Kuroyukihime también, por lo que se agachó y dijo en voz baja.
“No voy a huir… ¡No quiero huir y abandonar a un camarada!”
“Camarada… Sí que eres un completo idiota. Haz lo que quieras.”
Apuntando su dedo índice hacia el extremo Oeste del cráter, el Rey rojo le gritó al Rey Amarillo de pie en el borde.
“¡Yellow Radio! ¡Tu preciosa barra de ataques especiales ya debe estar vacía! Ahora es mi turno de devolverte el favor… ¡¡y no lo olvides, si soy yo quien te derrota, serás tú quien desaparezca de aquí para siempre!!”
La presión del momento obligó al Rey Amarillo retroceder un paso.
Por su parte, Niko avanzó otro paso y abrió ambos brazos.
“¡¡Ven… Armamento Mejorado!!”
Las llamas aumentaron e hicieron flotar suavemente al avatar escarlata.
A su alrededor, armamento hecho de llamas comenzó a aparecer uno tras otro, cubriendo a la chica por todos lados. Contenedores de misiles en ambos hombros, una gruesa armadura, propulsores en la espalda— y en lugar de brazos, unos temibles y largos cañones aparecieron.
Fue entonces que el Rey Rojo Scarlet Rain tomó la forma de su otro nombre, «Fortaleza Inmóvil». Y aterrizó en el centro del cráter, haciendo temblar el piso, a la vez que un vapor blanco salía de todo su cuerpo.
Haruyuki pudo notar como los treinta avatares que los rodeaban dudaron por un momento. Dado que el territorio de la Legión Amarilla se encuentra en el lado Este de Tokio, no tenían muchas oportunidades para encontrarse con la Legión Roja, quienes controlaban el lado Oeste en Nerima y Nakano. Por lo que tal vez jamás lucharon con Niko, y hasta ni siquiera la habían visto luchar desde la Galería. Por lo que observando la verdadera forma de Scarlet Rain, lo primero que deben de haber sentido es temor al ser incapaces de comprender que esa enorme fortaleza era un Avatar de Duelo. Al igual que Haruyuki el otro día.
Mientras Haruyuki tragaba algo de saliva, pudo oír la voz de Niko con un potente efecto desde el interior de la fortaleza.
“Oye, Silver Crow. Siento pedirte esto, pero encárgate de los luchadores de corto alcance que se me acerquen por detrás.”
“En-entendido. Pero… Senpai…”
“No pondrán un dedo sobre esa chica, claro, si es que no me derrotan. Pero si me derriban, entonces ya no hay nada que hacer y debes salir volando de aquí con Lotus.”
“…”
‘Derribar’— en este contexto, significa que el Brain Burst de Niko será desinstalado a la fuerza.
Antes de que Haruyuki pudiera decir algo, el Rey Amarillo gritó con su venenosa voz de siempre.
“¡No hay nada que temer! ¡Eso no es más que una torreta estacionaria! ¡Si se acercan, sólo se trata de un montón de acero!”
Entonces levantó su mano derecha.
“¡Equipo de ataque cuerpo a cuerpo, es su turno! ¡Equipo de ataque a larga distancia, cúbranlos! ¡¡Vayan!!”
La luz se reflejó en el avatar amarillo, y mientras bajaba su brazo—
Cerca de quince Avatares de Duelo saltaron del borde del cráter con un grito de guerra y avanzaron hacia Scarlet Rain.
Respondiendo a sus gritos, Niko abrió los dos contenedores de misiles en sus hombros. Los misiles rastreadores brillaron de color rojo, y fueron disparados dejando una estela de humo blanco.
El grupo de misiles salió disparado hacia arriba y dieron una media vuelta en el aire, para luego caer en dirección a los Avatares de Duelo que se acercaban. Algunos huyeron llevándose los misiles tras de sí, otros tantos tomaron posiciones defensivas, y su carga bajó de intensidad.
Dos de los avatares que resistieron, fueron apuntados de inmediato por los cañones principales de ambos brazos.
Junto a un sonido de alta resonancia, los rayos de calor rubí tragaron a los desafortunados avatares. De forma instantánea, ambos sujetos se convirtieron en bolas de energía y explotaron, luego, unos enormes pilares de fuego mezclado con el color de sus armaduras subieron al cielo. Sus barras de vida fueron destruidas y ellos desaparecieron.
‘¡—De un solo impacto!’
Haruyuki estaba aterrorizado. Pero al mismo tiempo, pensó que tal vez sí tenían opción de ganar.
Sin embargo, los avatares especializados en ataques a larga distancia terminaron de recargar sus armas y resumieron su fuego. Era imposible que fallaran apuntando al enorme avatar de Scarlet Rain, así que sus ataques más bien eran absorbidos por la gran fortaleza.
Todo su cuerpo estaba cubierto de explosiones, pero el Rey Rojo no detenía sus ataques en lo más mínimo. Como respuesta, apuntó sus cuatro ametralladoras en dirección hacia los sujetos atacándola en el borde del cráter.
No podían más que aguantar los ataques larga distancia por el momento. Haruyuki apretó sus dientes con fuerza y recostó en el suelo el avatar de Kuroyukihime.
Según Niko, cuando pierdes contras las heridas en tu corazón, entonces el Avatar de Duelo ya no se moverá.
Haruyuki también había experimentado lo mismo.
Hace tres meses, cuando descubrió la existencia de la «Aceleración», él luchó para proteger a Kuroyukihime contra su mejor amigo Takumu— Cyan Pile. En esa ocasión recibió una gran paliza, y mientras era abrumado por sentirse inútil y débil, fue incapaz de ponerse de pie al lado del inconsciente avatar de Kuroyukihime.
Si en esa ocasión no hubiera escuchado los latidos de Kuroyukihime —fuesen una ilusión o no—, entonces Haruyuki probablemente se habría dado por vencido, no siendo capaz de despertar la «Habilidad de Vuelo» oculta en Silver Crow, perdiendo absolutamente todo.
Es por eso que al ver como Kuroyukihime era incapaz de moverse, Haruyuki no sentía rabia ni decepción.
Pero estaba triste.
No entendía por qué, pero estaba muy triste.
Haruyuki cerró sus ojos con fuerza, quitó la mano que sujetaba al avatar negro y se puso de pie, entonces se dio la vuelta y corrió con todas sus fuerzas.
Su objetivo era un avatar de corto alcance que se acercaba a Niko por detrás. Su color era verde oliva, con unos enormes y gordos brazos que terminaban en una “U” de metal en la punta.
El oponente vio como Haruyuki se acercaba de frente, y gritó con fuerza.
“¡Fuera de mi camino, parásito!”
Entonces apunto su brazo izquierdo en forma de U hacia Haruyuki y dijo.
“¡«Magnetron Wave»!”
Cuando el avatar nombró su ataque especial, unos rayos púrpuras fueron emitidos de su brazo, envolviendo a Haruyuki. Pero esto no le causo daño, en lugar de eso, capturó a Silver Crow con una fuerza impresionante y lo succionó hacia el brazo con forma de U.
“¡Jijiji, es fácil atraer a los de colores metálicos!”
Mientras el sujeto color verde oliva se burlaba, usó su mano derecha para golpear repetidamente a Silver Crow. Usando ambos brazos para defenderse, Haruyuki comenzó a pensar con calma.
‘Por el nombre de su ataque especial, debe estar usando atracción magnética. Entonces debiese tener un límite de tiempo. Además, es un ataque que puede detener al oponente por completo, así que no debe durar más de diez segundos.’
De pronto Haruyuki extendió ambos brazos y con sus manos cubrió la vista de su oponente. Luego desplegó sus alas y se elevó a los cielos rápidamente.
“Oye, quítame las manos de encima.”
Escuchando las quejas de su oponente y aún unidos por el imán, Haruyuki siguió subiendo unos cuantos metros más.
Y cuando ya estaban bien alto, las ondas púrpuras generadas por el magnetismo desaparecieron, y el oponente se apartó de Haruyuki cuando se mano izquierda ya estuvo libre.
“¿Nada más que cubrirme los ojos? Eso no me causará ningún daño… ¡¿pero quéeeee?!”
Haruyuki no hizo más que ignorar a su oponente mientras este caía luego de percatarse que estaba en el cielo y sin nada a que aferrarse. Bajó a toda velocidad y pasó al lado del avatar magnético en caída libre, luego extendió su pie derecho y avanzó como un cohete.
“¡…Uoooo!”
A la vez que se concentraba en su ataque, Haruyuki fue capaz de atravesar la espalda de un avatar equipado con un taladro que estaba a punto de saltar sobre Niko. El avatar enemigo quedó enterrado en el suelo luego del fuerte impacto, y Haruyuki utilizó su mano izquierda para golpearlo en la nuca.
“¡Aaa… Gaaa… Aaa!”
Haruyuki se alejó del su enemigo luego de romperle dos vértebras del cuello, y un poco más allá pudo ver como el avatar de los imanes golpeaba el suelo. Con ese aterrizaje tan fuerte, aquel sujeto tampoco sería capaz de moverse.
Mientras Haruyuki saltaba sobre él para acabarlo de una vez por todas, recibió un fuerte puñetazo en su mejilla derecha.
El golpe lo mandó a volar muy lejos y dio varias vueltas en el piso. El fuerte dolor de sus dientes rotos nubló su visión por un momento.
Haruyuki ignoró el insoportable dolor y se puso de pie al ver como el tercer enemigo se acercaba a él. Su cuerpo era rectangular y parecía estar hecho de roca, además de estar cubierto por una túnica celeste de artes marciales. Su máscara le recordaba a un Moai y era algo cómica, pero lo que no era gracioso era el golpe de esos puños de roca. Era básicamente un avatar de ataque a corto alcance sin ninguna arma, pero su tipo de ataques ortodoxos eran muy peligrosos.
El artista marcial entró en rango de ataque silenciosamente y propinó una fuerte patada frontal.
El delgado cuerpo de Silver Crow fue su punto a favor para esquivar el golpe directo, pero de todas formas la patada rozó su costado y sacó chispas en su cuerpo, disminuyendo su barra de vida. Haruyuki dio un puñetazo izquierdo como contrataque, pero fue bloqueado por el enorme brazo derecho de su oponente como si nada.
‘—Los Linkers de color metálico son débiles contra ataques contundentes a corta distancia, así que cuando te enfrentes a ese tipo de situaciones...’
Haruyuki de pronto recordó una de las tantas lecciones que Kuroyukihime le había enseñado.
‘—No te defiendas ni contrataques a causa del pánico, trata de seguir su ataque y usar su propio impulso a tu favor. Con tu velocidad de reacción debiera ser suficiente. Recuerda, no importa cuan fuerte sea un puñetazo, es lento comparado a una bala, no lo olvides.’
“¡¡Zeriaaa!!”
El avatar artista marcial lanzó un derechazo directo. El puño se acercaba rodeado de una aura azul, mientras Haruyuki dejaba de lado su temor y observaba.
‘Cuando esté cerca, le doy la espalda, luego ubico mi mano izquierda bajo su puño y pongo mi peso en mi pie derecho.’
“¡¡…Raaa!!”
Acompañado de ese grito para alentarse, Haruyuki aleteó con todas sus fuerzas por un momento. Con la potencia generada, dio un gran impulso con su pie derecho y usó la potencia del golpe para catapultar a su oponente. El brusco artista marcial ahora giraba en el cielo.
“¡Niko, arriba!”
Escuchando el grito de Haruyuki o no, Scarlet Rain disparó los misiles de su hombro y estos impactaron al artista marcial en el cielo. Envuelto por todas las explosiones, el avatar cayó al suelo cubierto en humo y un segundo después, un pilar de luz celeste se elevó al cielo y este desapareció.
“Ja, nada mal para un debilucho como tú, Silver Crow.”
“¡Vaya, gracias!”
Haruyuki tomó las malas palabras de Niko como un cumplido, y lo próximo que hizo fue observar al avatar negro que estaba tendido en el suelo un poco más allá, aunque eso lo distrajera un poco de su siguiente oponente.
‘—Ella… Kuroyukihime definitivamente no es una súper mujer que es perfecta en todo. Es una estudiante de escuela media al igual que yo, una chica que siente y sufre.’
Haruyuki no era capaz de olvidar el llanto de Kuroyukihime, aunque este no fue con lágrimas, sino con palabras. Pero aun con eso, la admiración y adoración que sentía hacia ella no bajaron ni un poco.
No se trataba de ser fuerte.
Era sobre tener la voluntad para volverse fuerte. Era el alma que continuaba brillando resistiendo distintas adversidades, Haruyuki se sentía completamente atraído por eso.
‘—Es por eso que debes ponerte de pie nuevamente. No sé que tipo de relación tuviste con el antiguo Rey Rojo, pero debes superarlo y ponerte de pie. ¡Acaso me equivoco!’
Haruyuki rogaba por ello con todas sus fuerzas, a la vez que el fiero ataque de la Legión Amarilla continuaba.
No quedaban más de diez avatares de corto alcance, pero estos comenzaron a avanzar de todas direcciones. Los ataques de largo alcance caían como lluvia para cubrirlos.
“¡No me subestimeeeeeen!”
Con ese fuerte rugido, Niko liberó el poder de sus dos cañones, de ambos contenedores de misiles, y de sus ametralladores.
Todo salió disparado— justo después, Haruyuki pensó haber escuchado un extraño sonido.
Era un sonido de alta frecuencia que parecía sacudir el aire. En ese momento, Haruyuki comenzó a ver doble, y hasta triple. Los misiles de Scarlet Rain giraron en el aire y fueron en direcciones erróneas. Incluso los rayos de los cañones principales que se encontraban apuntando a los atacantes al borde del cráter, fallaron y golpearon un edificio lejano.
“¡Mierda… están interfiriendo las señales!”
Niko gritó algo apresurada.
“No es Radio… ¡debe ser uno de sus subordinados amarillos! ¡Encuéntralo!”
“¡Entendido!”
Haruyuki rápidamente expandió sus alas al dar su respuesta y dio un gran salta para volar. Pero.
Dos cables como serpientes tomaron a Haruyuki por los pies y lo estrellaron con el suelo. Aun sorprendido por lo que ocurría, Haruyuki trató de cortar los cables con las filosas puntas de sus dedos. Sin embargo.
“¡«Electric Therapy»!”
“¡¡…!!”
Sin duda era el nombre de un ataque especial, y pronto unos rayos azules comenzaron a recorrer el cuerpo de Haruyuki, recibiendo un fuerte choque eléctrico. Viendo a su alrededor, pudo ver un avatar de aspecto mecánico al que le salían dos cables de sus brazos, quien en su espalda cargaba un equipamiento parecido a un transformador, que emitía unas chispas.
El ataque no parecía causarle demasiado daño, sino que más bien lo aturdía, pero era suficiente para inmovilizarla y que no pudiera quitarse los cables de sus pies.
“¡Gu… u…!”
Haruyuki se quejaba mientras el avatar eléctrico reía.
“¡Kijijiji! ¡Quédate quieto por un segundo, mocoso! ¡Al menos hasta que desnudemos al Rey Rojo!”
Tal y como decía, Haruyuki pudo ver como varios avatares se acercaban al avatar-fortaleza de Niko. Se acercaron por los puntos ciegos de sus cañones principales y comenzaron a golpear su Armamento Mejorado en las uniones usando puños y pies. Se veían volar chispas y pernos, y de a poco la gruesa armadura fue cayendo.
Haruyuki resistía con todas sus fuerzas el choque paralizante, y de esa forma volteó su cuerpo para arrastraste hacia el avatar eléctrico.
Pero la potencia de la electricidad no disminuía ni un poco, y ni siquiera podía mover su cabeza.
‘—Qué debo hacer. Qué debo hacer. Que es lo que debo hacer ahora, Senpai.’
‘—Vamos… si no me apresuro, ¡entonces Niko…!’
Desesperación era lo que aparecía en la mente de Haruyuki, a la vez que pudo oír una fuerte y ruidosa risa desde el lejano borde del cráter.
“¡…Jajajajaja! ¡¡Jajajajajajajajajajaja!!”
Era el Rey Amarillo, Yellow Radio. Su delgado y largo cuerpo expresaba su alegría con pantomimas, y su sombrero de dos cuernos se movía de lado a lado.
“¡Qué desagradable! ¡Qué cómico! ¡¿Qué acaso no tienen un poco de dignidad como Reyes?! ¡Esto sólo demuestra que no tienen lo necesario para ser un Rey! El Rojo no es más que un farsante recién llegado y el Negro un despreciable traidor.”
Los despiadados insultos se mezclaban con el metálico sonido de algo rompiéndose. Y con ello, la voz de una niña llena de dolor.
“A… a…”
Haruyuki vio en esa dirección, y pudo ver un enorme avatar de pie en uno de los contenedores de misiles de Scarlet Rain, sosteniendo su cañón principal izquierdo.
Utilizó su gran tamaño para tirar el cañón hacia arriba. Gran cantidad de llamas y chispas salían de las junturas, casi parecía sangre fresca.
Eventualmente, el gran avatar le arrancó el cañón, junto a ello dejando salir un ensordecedor sonido de metal rompiéndose.
Unido a ello, sin duda era el roto brazo izquierdo de Niko el que estaba colgando. Niko no fue capaz de soportar el dolor y lanzó un grito, mientras el avatar enemigo levantaba el cañón como un premio de guerra e incitaba a sus compañeros.
“¡Muy bien! ¡El Rey Rojo no es gran cosa! ¡Chicos, quítenle la armadura y saquen a esa niña de ahí! ¡¡Vamos a humillarla por completo antes de que su barra de vida se agote!!”
Haruyuki apretaba sus dientes con fuerza y ya casi podía sentir como se quebraban, todo mientras trataba de estirar sus brazos para arrastrarse en el piso.
Frente a él, estaba el negro avatar Black Lotus tendido en el piso y cubierto de tierra, sin que se pudiera ver luz alguna en sus ojos.
“Senpai… Senpai.”
Haruyuki dejó salir una ronca voz desde su paralizada garganta.
Detrás de él aun podía oír las armas de Niko disparándose, demostrando que no se rendiría. Sintiendo las ondas de choque de las explosiones que no daban en su blanco, Haruyuki gritó.
“¿Estás de acuerdo con esto? ¿Es éste el final que tanto esperaste para este juego?”
La imagen de anoche apareció en su mente, la imagen de las verdaderas Kuroyukihime y Niko durmiendo abrazadas una de la otra.
Lo que esa escena representaba y lo que ambas chicas en realidad deseaban… Haruyuki era incapaz de entenderlo. Pero de una cosa estaba seguro, de que todo acabaría si no hacían algo. El débil lazo que nació por casualidad esa noche sería destruido sin piedad.
“Senpai… ¡¡Rey Negro!!”
Haruyuki uso toda su fuerza en ese grito.
Él era incapaz de comprender el tamaño de la herida en el corazón de Kuroyukihime. El primer Rey Rojo— un compañero y amigo, fue traicionado y asesinado mientras mostraba la mejor de las intenciones. Kuroyukihime debió continuar sufriendo en silencio largo tiempo después de hacer tal cosa.
No, quizás ella y «Red Rider» eran más que sólo compañeros o amigos. Y así, fue derrotado por sus propias manos.
Pero.
Incluso si eso fuese cierto.
“¡¡Qué son la «Aceleración» y «Brain Burst» para ti!!”
Golpeando el suelo con su puño rodeado de chispas, Haruyuki exclamó con pasión.
“¿Es este el tamaño de tu ambición por llegar al Nivel 10 y ver lo que hay más allá? ¡Es tan insignificante que lo abandonarás sólo por los recuerdos de un hombre! ¡Si en verdad quieres superar los límites humanos, no deberías dejar que tus remordimientos te frenen! ¡Por cuánto tiempo piensas estar tendida allí! ¡Acaso no juraste que avanzarías destruyendo y derribando todo tipo de obstáculos hasta que fueses la última en pie! ¡¿Acaso me equivoco, Black Lotus?!”
‘Rin’.
Frente a su mano estirada… ¿acaso fue una ilusión cuando vio que el negro casco se movió?
No, no lo era. Dentro del estilizado casco, pudo ver como unas luces violetas brillaban, como unas estrellas distantes. Brillaban de forma débil junto a un sonido ‘tump tump’.
“Sen… p…”
Haruyuki dijo en voz baja.
Pero el fuerte sonido de una vibración no lo dejó terminar.
El sonido venía bajo el casco negro, donde los dos ojos ahora brillaban con fuerza.
La misma luz comenzó a recorrer la armadura semi-transparente que parecía estar hecha de vidrio volcánico. Esa luz arrancó todo el polvo cubriendo su cuerpo, reviviendo su reflejo opaco.
Finalmente, las espadas en brazos y piernas comenzaron a vibrar.
Haruyuki veía sin pestañar como el avatar negro oscuro se levantaba, como si fuese tirado por cuerdas invisibles.
Black Lotus se puso de pie, y lentamente volvió a flotar sobre el piso y comenzó a moverse. Se acercó a Haruyuki quien estaba tendido en el piso víctima del ataque eléctrico.
“Haruyuki-kun.”
Su tono de voz era amable y estricto, como de costumbre.
“…Sí.”
Al escuchar su respuesta, Kuroyukihime le habló con su típico tono de voz irónico.
“Por las cosas que dijiste, pareciera que Rider y yo estábamos enamorados.”
“¿Acaso… me equivoco?”
“Completamente equivocado. ¿Acaso no te lo dije? Tú eres el primero. Además… ya deja de estar tendido ahí y trata de enterrar tu mano en el suelo.”
“Eh… d-de acuerdo.”
Tal y como le ordenaron, Haruyuki juntó sus afilados dedos y acto seguido los enterró en la tierra.
En ese instante, pudo sentir como la corriente que paralizaba su cuerpo comenzaba a fluir al suelo y dijo.
“Ah… la tierra…”
“Si conoces la afinidad y características del ataque, deberías ser capaz de pensar en una contramedida aunque sea la primera vez que lo ves. Tal parece aun me queda mucho por enseñarte.”
Lo siguiente que Haruyuki pudo oír fue el patético sonido de algo reventando detrás de él, por lo que giró su cabeza para mirar. Fue ahí que vio como el avatar eléctrico retrocedía lentamente mientras un humo blanco salía del transformador en su espalda.
“Deberías ser capaz de encargarte del resto. —Mientras tanto iré a ayudar a la pequeña niña víctima de esta trampa.”
Lo dijo como si no fuera gran cosa.
Junto con el silbido causado por la vibración del aire, el avatar negro oscuro desapareció.
Sin aviso alguno ni preparación previa, Black Lotus se movió a una velocidad increíble. Kuroyukihime avanzó unas decenas de metros como un rayo de color negro, y unos segundos después ya estaba frente a los avatares de corto alcance que atacaban a Niko.
“Uaaa…”
Luego de la sorpresa general del grupo, el sujeto que sostenía uno de los cañones del Rey Rojo lo hizo a un lado y abrió ambas manos, e intentó atacar a Kuroyukihime con los fuertes dedos que habían arrancado una parte de Scarlet Rain. Debe tratarse de un avatar especializado en agarres, en lugar de ataques contundentes.
Haruyuki no tenía muy claro en que estaba pensando Kuroyukihime, ya que ella simplemente extendió su brazo derecho como diciendo ‘por favor sostenlo’. Los ojos del avatar enemigo brillaron con fuerza, y sus manos se extendieron como serpientes para agarrar el brazo de Black Lotus en dos partes.
“Te tengo, «Oneway Sl...».”
Al nombrar su Ataque Especial, se dio la vuelta y puso el brazo que sostenía sobre su hombro derecho, tomando una postura de lanzamiento típica de judo — pero unas cosas cayeron al piso en ese momento.
Eran diez gruesos cilindros. Sus dedos. Los dedos el avatar que sostenía el brazo-espada de Kuroyukihime, puso fuerza en estos al momento de lanzarla, y fueron cercenados por la filosa hoja.
“Lo siento, las técnicas de agarre no funcionan conmigo.”
Fue lo que le dijo Kuroyukihime a su oponente, quien ahora se encontraba incapaz de moverse, por lo que la espada de Black Lotus lo rebanó como mantequilla.
Desde el hombro derecho hasta el costado izquierdo, un tenue destello lo atravesó. La parte superior del avatar enemigo cayó el suelo, seguido del restante 70% de su cuerpo que también colapsó en la tierra.
“¡¡Aaaa… GA… GAAAAAAAA!!”
Al parecer todavía no se agotaba su barra de vida, por lo que no desapareció, aunque tal vez el desaparecer hubiese sido mejor para él. Estaba gritando del dolor luego de que su cuerpo fuera cortado de tal forma, mientras movía de forma frenética el brazo que todavía le quedaba. Kuroyukihime apartó su vista de aquel avatar para observar a los restantes 7 u 8 enemigos que quedaban.
“No se si ya lo habrán notado, pero aquellos que luchan contra mí siempre experimentan el dolor de perder alguna parte de sus cuerpos.”
Su voz era calmada, pero la crueldad de esas palabras dejó a todos en el campo sin aliento.
“No me digan… ¡que no quieren sentirlo también!”
Con ese grito, el avatar negro atacó al azar a un desafortunado sujeto. Agudos sonidos metálicos, interminables gritos, y las desesperadas súplicas de esos Burst Linkers era todo lo que podía escucharse.
Al ver que ella no tenía problemas con sus oponentes, Haruyuki se puso frente al avatar eléctrico que aun tenía sus cables alrededor de los pies de Silver Crow.
Cuando sus miradas se cruzaron, el enemigo se giró un poco hacia Haruyuki para enseñarle su anticuado equipamiento y levantó una mano.
“¡Oye, espera! ¡Estoy recargando mi batería…!”
“¡¡Como si fuera a esperar!!”
Y Haruyuki tomó con ambas manos los cables en sus pies para soltarlos, y con un gran salto se alejó del suelo.
“¡Uaaaauauaua!”
Haruyuki ganó altitud mientras el enemigo que colgaba gritaba, luego se detuvo para flotar y girar en círculos.
“Uaa — Aaa — Aaa —”
De seguro el oponente ya estaba bastante mareado, y Haruyuki ya podía sentir suficiente potencia de fuerza centrífuga para soltar los cables. Así, el avatar eléctrico voló en dirección hacia el sur a una tremenda velocidad, donde pudo oírse un pequeño sonido de impacto venir de entre el grupo de edificios.
Haruyuki también se mareó un poco, por lo que sacudió con fuerza su cabeza para tratar de recomponerse y miró hacia abajo. El campo de batalla por completo estaba a su vista.
Esto ya no podía llamarse «Duelo», sino más bien «Masacre».
La mayoría de los avatares azules de corto alcance luchaban con sus pies y manos, y algunos con martillos o espadas. Esa era la estrategia para avatares azules, básicamente alternan entre ataque y guardia, esperando una apertura para atacar a su oponente.
Pero Kuroyukihime — Black Lotus, era capaz de realizar diversos ataques gracias a sus cuatro miembros-espadas, que tal parece se especializaban en combate a súper corto alcance.
Cortes y cortes, era lógico que atacara con sus espadas. Si el oponente se defendía con sus brazos, estos serían cercenados, y si huían, no bastaba más que seguirlos y levantar la pierna para partirlos por la mitad. Era imposible mantener contacto directo, todo lo que tocaba era cortado, justo como un lirio de agua negro.
Sus ataques parecían una hermosa danza, pero a la vez causaba un doloroso rechazo.
Sin haber pasado más de un minuto, la mayoría del grupo de ataque a corto alcance fue aniquilado o estaban sin varios de sus miembros, soportando el fuerte dolor y rodando en el piso.
“¡¡Ma… maldita!!”
Ese fue el grito del último Burst Linker que quedaba en pie. Entre sus manos sostenía una larga y gruesa espada, la que blandió en dirección a Kuroyukihime.
Su velocidad y coordinación eran perfectas. Kuroyukihime no esquivó la veloz espada plateada que iba hacia ella, sino que la detuvo bloqueando ambos brazos-espada.
El sonido de ambos metales hacía eco en el lugar. Cada segundo que pasaba, las espadas negras y la plateada se hundían cada vez más entre sí.
Haruyuki era incapaz de determinar cual cedería primero. Sin embargo, pudo notar como la máscara Hannya del avatar espadachín hizo una expresión de menosprecio.
“¡Zann!”
En el momento que el enemigo dio ese grito, justo debajo de su espada, las manos de Kuroyukihime cortaron de izquierda a derecha en un instante.
Lo que cayó con un ruido seco fue la cabeza del avatar enemigo y la parte superior de su gran espada. Se podía ver en la mirada de la cabeza rodando en el piso su incredulidad ante lo que estaba ocurriendo, ante lo que Kuroyukihime lo perforó sin piedad con la punta de su pie izquierdo. Un pilar de luz se elevó al cielo, y el enemigo voló en pedazos como una figura de cristal, y desapareció.
Nuevamente el silencio llenó el lugar.
Lo que rompió la calma fue una corta palabra que vino desde el borde del cráter.
“…Por qué.”
Finalmente perdiendo la compostura que había mantenido hasta ahora, el Rey Amarillo, Yellow Radio, dijo en tono de queja.
“¿Por qué apareces ahora para destruir el carnaval que he preparado por años? Estabas muy bien ocultándote en tu sótano, ¿por qué ahora?”
Los inclinados y delgados ojos de la máscara de payaso emitían una blanca luz fluorescente. Yellow Radio luego extendió sus largos brazos a ambos lados y comenzó a balancearse sobre un pie, a la vez que movía su cabeza lentamente a ambos lados.
Una pequeña risa pudo oírse bajo la máscara, y con el dedo índice de su mano derecha apuntando directo a Kuroyukihime, el Rey Amarillo recuperó su voz burlona de siempre y dijo.
“¿Acaso ya olvidaste a nuestro amigo al que traicionaste y decapitaste…? Me pregunto dónde se encuentra y que estará haciendo en estos momentos. Sin la posibilidad de volver nuevamente al Mundo Acelerado… ¿En realidad recuerdas bien quién es la culpable de todo eso? Si hubiera sido yo, no sería capaz de olvidarlo. No habría problemas si hubiera sido una pelea normal, ¿pero con un ataque sorpresa como ese…?”
‘Kuu, kuukuukuukuuku.’
Al escuchar la risa del payaso, Haruyuki gritó en su mente.
‘—No lo escuches. Ese tipo quiere arrebatarte nuevamente tu espíritu de lucha.’
Pero Haruyuki no podía decir eso. El Rey Negro y el Rey Amarillo deben haber luchado y entrenado juntos desde los comienzos del Mundo Acelerado, debieron ser amigos hasta el incidente de hace dos años, por lo que Haruyuki creía que no cualquiera tenía el derecho de entrometerse.
Haruyuki descendió lentamente, aterrizando detrás de Black Lotus, quien estaba al lado de la media destruida Scarlet Rain. Lo único que pedía en estos momentos era que ella no perdiera ahora.
De pronto—.
Kuroyukihime levantó su brazo derecho sin emitir ningún sonido. La hoja de vidrio volcánico no tenía ni un rasguño luego de sus anteriores batallas y ahora apuntaba al Rey Amarillo.
Y se pudo sentir la voz suave como la seda del Rey Negro.
“…Te equivocas en algo, Yellow Radio.”
“¿Oh? ¿En que sería? Y no me digas que tu ataque sorpresa no fue una cobardía.”
“No es eso. Crees que el tomar tu cabeza me pesará tanto como el haber tomado la cabeza de Red Rider. Déjame decirte una cosa…”
Kuroyukihime cortó el aire horizontalmente con su mano derecha y dijo.
“¡Me desagradaste desde la primera vez que te vi!”
El torso del Rey Amarillo se inclinó hacia atrás.
Kuroyukihime miró a su costado, luego detrás de ella y dijo rápidamente.
“¡Rain! ¡¿Ya terminaste de recargar las armas que te quedan?! ¡¡Crow, protégela!! — ¡¡Aquí voy!!”
Partiendo la tierra en dos en el fondo del cráter, Black Lotus avanzó a toda velocidad hacia Yellow Radio.
“Maldición… ¡dame algo más de tiempo!”
Era Niko quien maldecía. Acto seguido, apuntó con dificultad el cañón derecho y la mitad de contenedores de misiles que le quedaban hacia el grupo de enemigos especializados en ataques de largo alcance que se encontraban en el borde del cráter.
Haruyuki no estuvo simplemente escuchando la conversación entre Kuroyukihime y el Rey Amarillo, él uso esos cuantos segundos de pausa para encontrar a alguien. Su objetivo era el avatar especializado en ataques indirectos que interfería con las armas de Niko.
‘¡—Él es!’
Pudo ver como un avatar amarillo se ocultaba detrás de un avatar rojo en el extremo norte del cráter. Tenía unos pequeños contenedores abiertos en ambos hombros, y desde el centro era posible diferencia una antena parabólica con el cilindro del centro emitiendo efectos de luces.
Luego de determinar que ese avatar era quien realizaba los ataques con ondas eléctricas, Haruyuki partió en aquella dirección con toda su fuerza.
Sin embargo, aun quedaban unos largos treinta metros desde el centro del cráter hacia el borde de este. Incluso aunque Silver Crow fuera veloz, no llegaría de inmediato, por lo que el avatar rojo que lo cubría tendría tiempo suficiente para apuntar su enorme arma.
Un ligero escalofrío recorrió la espalda de Haruyuki. Era exactamente esta situación por la que tenía tan baja tasa de éxito en los duelos de las últimas semanas, y este era el peor escenario — estaba en la mira de un arma de fuego en un espacio abierto y sin lugares para ocultarse.
La única opción era esquivarlo.
Si no derrotaba a ese avatar, entonces el poder de fuego de Niko permanecería sellado. Si eso sucedía, entonces los avatares rojos de la Legión Amarilla concentrarían sus ataques en Kuroyukihime, previniendo de esta forma que ella entrase en combate con el Rey Amarillo.
Si Haruyuki podía esquivar o no ese disparo era lo que determinaría el rumbo de esta batalla.
La enorme presión de esta situación hizo que sus manos y pies se paralizaran. Su visión se estrechó y no podía ver más que el cañón del arma frente a él. Esto no iba bien, de esa forma sería incapaz de esquivar el disparo. Después de todo, sólo pudo esquivar la bala en la sala de entrenamiento virtual un 30% de las veces.
‘—No. La situación es diferente a la del cuarto blanco.’
Eso era debido a que el arma ahora la sujetaba un avatar. Éste tenía un camuflaje café en su cuerpo y grandes cristales en su rostro con forma de ojos, sin duda se trataba de un avatar francotirador.
‘No mires al arma, míralo a él. Trata de ver lo que hará antes de que jale el gatillo.’
En ese momento, lo único que Haruyuki podía ver era al avatar enemigo, todo lo demás se esfumó de su vista. Olvidó lo que ocurría en el campo de batalla por un momento, y abrió ambos ojos para ver bien y concentrarse en la figura que sostenía el rifle.
El enemigo puso su cabeza en posición y levantó unos cuantos milímetros su hombro derecho, y su mano derecha—
‘¡…Ahora!’
—Y su mano derecha presiona el gatillo, liberando una luz blanca del cañón del rifle.
Para ese entonces, Haruyuki ya se había inclinado hacia la izquierda.
Partiendo al aire, un rayo de calor pasó tocando levemente el pecho de Haruyuki, para luego rozar su hombro. Ignorando el dolor, cruzó los diez metros que faltaban para llegar donde se encontraban sus enemigos, pasando al avatar rojo para encontrarse con el avatar especializado en ataques indirectos que se ocultaba detrás.
Para la sorpresa del avatar de ondas eléctricas, Haruyuki atacó ambas antenas con sus manos filosas como cuchillas. Al confirmar como el delicado equipamiento caía a pedazos, Haruyuki bajó un poco en dirección al cráter.
‘¡—Niko!’
No tenía claro si su llamado mental la había alcanzado o no, pero en el instante que la interferencia se detuvo, Scarlet Rain disparó todas las municiones que le quedaban.
Su cañón derecho disparó un enorme rayo de calor, y varios misiles vinieron tras ella por el lado izquierda. Se pudo ver una cortina de fuego elevándose en uno de los extremos del cráter. Era de esperarse que sus ataques no acabaran con todos los enemigos de inmediato, pero eran suficiente para detener todos los ataques que iban en dirección a Black Lotus.
Luego de que cesaran las explosiones, el feroz grito de Kuroyukihime pudo escucharse.
“¡¡Radio!!”
La espada de su brazo derecho dibujó una oscura trayectoria en el aire.
Lo que ahora estaba flotando en el aire era el cuerno derecho del gorro de Yellow Radio.
“¡¡Lotus!!”
Su enfadado grito no dejaba entrever nada del bromista tono de voz que había lucido hasta ahora, y de esta forma, el Rey Amarillo hizo aparecer un gran bastón para iniciar su contrataque. Kuroyukihime ahora repelía los ataques dorados con su espada izquierda, haciendo saltar chispas en todas direcciones.
Niko por su parte seguía disparando sus misiles para contener el ataque de los enemigos, y Haruyuki aterrizó en parte de la gran armadura de Scarlet Rain, siempre mirando la intensa batalla que tomaba a lugar en el borde oeste del cráter.
Un Rey es un Burst Linker de Nivel 9, y esta era la primera vez que veía una batalla entre dos Reyes.
Probablemente eso algo que todos en ese lugar — incluyendo a las dos personas luchando — estaban pensando.
Aparte de Niko, los «Siete Reyes de Color Puro» llegaron al Nivel 9 casi al mismo tiempo hace ya dos años. Fue entonces que descubrieron la cruel regla de muerte súbita necesaria para llegar al Nivel 10, y para evitar pelear hasta la muerte, decidieron acordar una conferencia entre ellos para solucionar el asunto.
En aquella conferencia, el Rey Negro, Black Lotus, atacó por sorpresa al primer Rey Rojo, Red Rider, y lo mató con un solo ataque crítico. Un Rey matando a otro Rey, esa fue la primera y única vez que algo como eso ocurrió. Después de ese incidente, el Rey Negro fue catalogado como un traidor y se mantuvo oculto en la red de la Escuela Media Umesato por casi dos años, mientras que los otros Reyes firmaron un tratado de no invasión donde se comprometían a no dejar su territorio.
Es por eso que esta era la primera vez en la cual jugadores de Nivel 9 luchaban de forma normal entre sí desde el comienzo del Mundo Acelerado.
Haruyuki y Niko se detuvieron.
Al igual que los restantes diez miembros de la Legión Amarilla que quedaban en pie, todos detuvieron sus ataques y observaron la pelea, anonadados.
‘¡—Qué rápido!’
Pensó Haruyuki, impresionado y admirado desde el fondo de su corazón.
Si no prestaba atención, le sería imposible seguir la pelea, ya que lo único que vería serían unos cuantos destellos por aquí y por allá. Los cuatros, y hasta cinco ataques seguidos del Rey Negro fueron impresionantemente repelidos por el bastón del Rey Amarillo, mientras este buscaba alguna abertura y usaba sus largas piernas para intentar patearla, pero Kuroyukihime también era capaz de bloquear golpes, y de esta forma ella detuvo con una de sus piernas los ataques de Radio. Cada impacto entre ellos causaba una onda que distorsionada los alrededores.
Con los extremadamente poderosos ataques continuando, el piso se comenzó a agrietar bajo ambos contendientes, y algunos escombros salieron despedidos del lugar. El lugar donde luchaban estaba cubierto por una presión incolora, y las luces brillando desde las armaduras de ambos avatares parecían incrementar su resplandor.
“…Ya casi.”
Murmuró Niko, y Haruyuki le preguntó de inmediato.
“¿Q-Qué?”
“Sus barras de ataque especial ya deben estar llenas. La batalla real está a punto de comenzar.”
Antes de que pudiera terminar su frase… ‘¡Baan!’, un impactó que más bien pareció una explosión, obligó que ambos luchadores se alejaran el uno del otro, y rápidamente retomaron la compostura.
Kuroyukihime bajó su cintura y mantuvo su brazo izquierdo en forma horizontal frente a su cuerpo, luego ubicó su espada derecha en forma perpendicular bajo su otro brazo. Las largas espadas comenzaron a vibrar y fueron cubiertas por una luz violeta, a la vez que un vibración de baja frecuencia sacudía el aire.
Por su parte, Yellow Radio cruzó ambos brazos frente a él, sosteniendo el bastón dorado. Las esferas en ambos extremos del bastón también comenzaron a brillar.
La alta presión en el ambiente no paraba de subir, lo que puso algo nervioso a Haruyuki.
El Ataque Especial de un Rey, Haruyuki ya había sigo testigo de parte de ese poder en su duelo contra Niko. El enorme rayo lanzado desde uno de sus cañones destruyó parte del edificio del gobierno metropolitano de Shinjuku que se encontraba en la lejanía sin mucho esfuerzo.
Si ataques de potencias similares se enfrentaban en tan corta distancia, ¿qué iría a ocurrir? Haruyuki estaba en trance esperando el siguiente movimiento, cuando la voz de Niko llegó a sus oídos.
“…No con poder, esto se decidirá por velocidad.”
“Eh… ¿a qué te refieres?”
“No importa como lo veas, el ataque especial de Lotus es un ataque directo. El de Radio debe ser algún tipo de ilusión. Eso quiere decir que antes de que el ataque especial de Radio entre en efecto, lo que decidirá esta batalla será si el ataque de Lotus puede hacer contacto o no.”
Haruyuki tragó algo de saliva.
El sol ya se ocultaba y pudo atravesar el grueso manto de nubes negras, de esta forma, un rayo de luz solar bajo sobre ellos.
Ese rayo se reflejó en las espadas de vidrio volcánico, en ese momento.
La majestuosa voz de Black Lotus hizo eco en el lugar.
“«Death By Pi…»”
A la vez que Yellow Radio dijo.
“«Futile Fortune Wh…»”
Sin embargo.
A pesar de que ambos ataques especiales fueron invocados al mismo tiempo, ninguno pudo terminar de nombrarlo.
‘Ton.’
Un corto pero abrumador sonido resonó cerca de los Reyes y enmudeció sus voces.
Era el sonido de algo perforando el brillante pecho amarillo de Yellow Radio por detrás.
Kuroyukihime se detuvo a mitad de su ataque especial, y al igual que Haruyuki, Niko, los otros Burst Linkers y el mismísimo Rey Amarillo, todos quedaron mirando los 15cm de metal gris plateado que sobresalía de la armadura de Yellow Radio.
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